“Imagen. Mbappé marcó el gol de empate y peleó con la defensa azulgrana. Fotografía X Real Madrid.”
Afrontaba el Real Madrid la final de la Copa del Rey como tapado, con un favoritismo para el Barcelona tanto por la situación en la liga como por los últimos enfrentamientos entre ambos en los que los catalanes salieron victoriosos.
FC Barcelona 3 Real Madrid 2
Comenzó el partido con el guion esperado, el Barcelona controlaba el balón y el Real Madrid esperaba bien cerrado atrás esperando su momento.
En el minuto 8 llegó la primera mala noticia para los blancos, Mendy tenía que abandonar el campo lesionado, el francés forzó para llegar titular al partido y pronto tuvo que abandonar el campo, Fran Garcia salía en sustitución del lateral galo.
Los minutos pasaban y el monólogo del Barcelona continuaba en Sevilla, sin embargo, Courtois tampoco se veía obligado a intervenir. Hasta que en el minuto 18 llegó la primera ocasión para los rivales, un disparo de zurda de Yamal que el portero belga dejó pasar, el balón terminó saliendo pegado al palo.
Solo dos minutos después Courtois mantenía el empate sin goles en el marcador con una gran parada tras disparo de Kounde.
Trataba el Real Madrid de sacudirse el dominio rival, sin embargo, en el minuto 28 llegó el jarro de agua fría para los blancos, Lamin Yamal dio un pase atrás para que Pedri, desde la frontal del área enganchara un derechazo imparable para el portero madridista.
Tras el uno cero el Real Madrid trató de cambiar el signo del partido, y en el minuto 34 Bellingham hacía el empate, pero la alegría fue momentánea porque el jugador inglés se encontraba en fuera de juego y el gol no subió al marcador.

Pasaban los minutos y el partido parecía equilibrarse, sin embargo, de nuevo fue el Barcelona el que pudo hacer gol, Olmo estrelló el balón en el poste en lo que pudo haber sido un gol olímpico.
Murió la primera parte sin ocasiones para ninguno de los dos equipos, y llegó el partido al descanso con la ventaja por la mínima para los blaugranas.
El mejor Madrid pone al Barcelona contra las cuerdas
Comenzó la segunda parte como terminó la primera, con dos disparos del Barcelona buscando ampliar la ventaja, sin embargo, en el minuto 50 tuvo el Real Madrid la oportunidad de empatar el encuentro, pero Vinicius se encontró con el portero blaugrana en un primer remate y el portero polaco sacó una buena mano tras un segundo remate del brasileño. Los madridistas se animaban en la grada con la esperanza de remontar ante el eterno rival.
Movió el banquillo Ancelotti, Mbappé entró tras el descanso, y cinco minutos después eran Guller y Modric los que saltaban al campo, y el Madrid mejoró.
En el 52 la tuvo Mbappé y solo dos minutos después Vinicius, eran los mejores momentos del equipo blanco que creía en la remontada.
El Madrid siguió apretando en los siguientes minutos, y tanto Mbappé como Vinicius dispusieron de varios disparos para hacer el empate, pero ninguno de los dos consiguió ver puerta.
El Barcelona, que se veía dominado por primera vez en el partido, trataba de salir a la contra, y en el minuto 60 dispuso de una clara ocasión, pero el disparo de cruzado de Raphinha salió muy desviado y sin peligro.
El Madrid cada vez se encontraba mejor en el campo, y fruto de ello el control del partido se hizo totalmente blanco, sin embargo, no eran capaces de concretar las ocasiones y la derrota se mantenía en el marcador.
Siguió el partido con dominio blanco, y aunque el Barcelona salía con peligro en cuanto veía la ocasión, era el gol del Madrid el que parecía más cerca.
Y en el minuto 68 apareció Mbappé, una jugada espectacular con caño incluido terminó con falta de De Jong sobre el francés, los jugadores del Madrid reclamaron la roja, pero el árbitro lo dejó en amarilla.
Cogió la pelota el galo que se estaba mostrando con muchas ganas y confianza y con un disparo cruzado a la cepa del poste hacía el empate, GOL para el Real Madrid que ponía las tablas en el marcador y daba señales de poder llevarse el partido.
Pudo hacer el Madrid el segundo en el minuto 73, una contra eléctrica con una gran carrera de Vinicius por la banda izquierda del ataque blanco, terminaba en un pase de la muerte que la defensa del Barcelona sacaba a córner cuando Mbappé esperaba el esférico con la escopeta cargada.
Los córneres favorables a los blancos se sucedían, pero sin suerte en el remate, hasta que en Modric sacó desde la derecha del ataque blanco, y Tchouameni saltaba más que nadie para rematar de cabeza y hacer el segundo para el Real Madrid. Dos a uno en el marcador para los merengues que rozaban la victoria con los dedos a menos de quince minutos para el final.
El segundo gol dio alas a los madridistas, que salían como balas en cuanto recuperan el balón, el partido había cambiado y era el equipo blanco el que parecía tener muchas opciones de hacerse con la victoria.
Pero como muchas veces en estos partidos, cuando mejor estaba el Real Madrid, una contra del Barcelona terminaba con un gol de Ferrán que se metía entre Courtois y Rüdiger, aprovechando la indecisión de los jugadores blancos para hacer el empate.
Quedaban 5 minutos para el final y comenzaba un partido nuevo.
Seguían dominando los blancos, anticipándose a cada balón y ganando cada carrera, pero no llegaba el tercero, hasta que en el minuto 96 el corazón de los madridistas se detenía, Asencio trata de cortar una entrada de Raphinha y el brasileño se iba al suelo, el árbitro sin dudarlo señalaba el punto de penalti.
Asencio negaba tranquilo y, finalmente, el canterano blanco tuvo razón, penalti anulado y amarilla a Raphinha por simular.
El partido se iba a la prórroga.
Comenzaba la prórroga con el Real Madrid rehecho tras el penalti anulado, y con coraje y fuerza seguía llevando el peligro a la portería
En el 3 de la prórroga la pegaba mal Brahim, en el 4 Araujo le quitaba un remate claro a Mbappé tras pase de Fran García. Sin embargo, el Barcelona no estaba muerto, y en el minuto 14 de la prórroga Ferran tuvo la ocasión para poner en ventaja a su equipo, pero su disparo se marchó desviado ante la atenta mirada de Courtois.
Descanso y comienzo de la segunda parte de la prórroga sin tiempo para descansar para los jugadores.
La segunda parte de la prórroga el partido se rompió, con los dos equipos lanzados por el gol, pero con un Madrid más incisivo y peligroso, teniendo la primera Bellingham tras un centro de Brahim, pero el inglés no pudo rematar por apenas unos centímetros.
Sin embargo, a cinco minutos del final, Koundé cortó un mal pase de Modric en la salida de balón y con un potente disparo cruzado ponía el tercero en la cuenta del Barcelona y parecía sentenciar el partido.
No se rindió el Madrid a pesar de todo, y en el 118 Mbappé era derribado dentro del área, pero un fuera de juego previo de Brahim anulaba la jugada.

El partido terminó con la derrota blanca, dura y quizás injusta por los méritos de uno y otro equipo, puesto que el Real Madrid jugó una segunda parte y una prórroga a un nivel desconocido esta temporada, sin embargo, el acierto de cara a gol decantó el partido y los blancos vuelven con una derrota que, si bien les impide ser campeones de Copa del Rey, les muestra el camino para el partido en Barcelona dentro de unas fechas donde el equipo blanco tendrá una oportunidad de pelear la liga hasta el final.
FC Barcelona: Szczesny; Koundé, Gerard, Cubarsí, Iñigo Martínez; Pedri, Lamine Yamal, Frenkie de Jong, Dani Olmo; Raphinha y Ferran. Sustituciones: Min.65, Fermín por Dani Olmo; Min.85, Gavi y Araújo por De Jong y Gerard; Min.98, Eric García por Pedri; Min.115, Pau Víctor por Ferran.
Tarjetas amarillas para Gerard, De Jong, Raphinha y Fermín.
Real Madrid CF: Courtois; Lucas Vázquez, Asencio, Rüdiger, Mendy; Valverde, Ceballos, Tchouaméni, Bellingham; Vnicius Jr. y Rodygo. Sustituciones: Min.11, Fran García por Mendy; Min.45, Mbappé por Rodrygo; Min.55, Güler y Modric por Ceballos y Lucas Vázquez; Min.89, Brahim por Vinicius Jr.; Min.111, Endrick por Rüdiger.
Tarjetas Amarillas para Modric, Bellingham, Tchouaméni y Ancelotti. Rojas para Lucas Vázquez, Rüdiger y Bellingham
Orgulloso de vosotros
Todo el mundo pensaba que iba a ser una masacre en toda regla. Todos, menos esos pocos optimistas que esté como esté el equipo confiamos en él. Y sin irme a temas que ya todos conocemos y que no nos están favoreciendo en nada ésta (bueno, ya viene de tiempo atrás) temporada, a lo mejor el juego del equipo no invitaba a creer en ellos. Como nos relata Rafa en su crónica, los nuestros estuvieron a merced del FC Barcelona durante la primera mitad, si bien es verdad, que salvo el gol y un par de intervenciones de Thibaut, lo demás fueron uyyys!!! por remates cercanos a los palos. Pero salvo en el arranque, la segunda mitad es de lo mejor que le hemos visto al equipo en ésta temporada. Calidad, entrega y compromiso con el escudo. Muy acertado hoy el míster en los cambios. Un Güler que se echó el equipo a la espalda, acompañado por la veteranía de Luka Modric. Fede y Antonio Rüdiger fundidos, dándolo todo por el equipo. Kylian y Vini percutiendo sobre la defensa blaugrana. Un excelso Aurelien. En fin, todos a una en busca de la victoria. Pena de ese segundo gol azulgrana cuándo ya acariciabamos la victoria. Fallos de esos que nos han costado puntos y derrotas a lo largo de la temporada. Pero con la entrega y el sacrificio de hoy, uno puede asumir la derrota. Duele, sí, pero cuando se cae de ésta manera, uno se puede marchar con la cabeza alta. Una pena, que aunque hemos sido muchos los madrisdistas desplazados a Sevilla para apoyar a nuestro equipo, uno palpara en el ambiente como la afición azulgrana confiaba más en los suyos. Mucho hueco libre en la zona destinada a nuestra afición, y lo que es lo peor, mucho blaugrana infiltrado entre nosotros. No sé de quién es responsabilidad qué esto suceda, pero si socios o peñas del club, revenden o ceden sus entradas a la afición rival, es para hacérselo mirar. En fin, que así y aunque duela, se puede perder, porque uno se va a casa triste, pero con la tranquilidad de que los suyos lo han intentado. Hoy más que nunca… ¡¡¡Hala Madrid siempre!!!
El rival te podía ganar por juego, pero no por ganas, y en el segundo tiempo lo demostraron.
Orgulloso de los nuestros, eso no quita que nuestro espíritu crítico espere una mejor planificación defensiva, tras dos años de graves lesiones.
Muy buena segunda parte de nuestro equipo en el que metimos muchísimo miedo en el cuerpo a todos los antimadridistas que se pensaban que íbamos a sufrir una humillación.
Lástima los dos errores clamorosos que ellos aprovecharon para marcar el gol del empate casi al final de los 90 minutos y el gol de su victoria casi al final de la prórroga.
Visto el juego realizado, da mucha esperanza para ganarles en Montjuit y ganar el título de liga.
No me quiero extender demasiado pero hay que reconocer que lo mejor que ha hecho el Barcelona es el fichaje de su entrenador ya que es la gran diferencia entre los dos equipos esta temporada.
Flink ha sacado lo mejor de cada uno de sus jugadores individualmente convirtiéndoles en un grandísimo equipo en conjunto con jugadores con no demasiado renombre, sin embargo Carletto , con un equipo lleno de estrellas ni ha sacado lo mejor de cada una de ellas ni ha trabajado o no ha sabido trabajar el juego en conjunto.
Hay que intentar ganar todos los partidos que nos quedan de Liga porque el Barcelona , a parte del partido que le queda contra nosotras, va a pinchar otro.
Hala Madrid!!
Bueno pues tal vez el perder el trofeo sea el mal menor si analizamos una serie de circunstancias que rodearon el antes, durante y después de su disputa.
En referencia al encuentro, en el que no éramos favoritos, realizamos un primer tiempo acorde a la previsión, mala situación táctica, poca entrega, ningún desborde, así hasta el final de la primera parte, que finalizó con el gol de Pedri.
Pero la entrada de Mbappè cambió todo en la segunda mitad, y el Madrid volvió por sus fueros. Fuimos capaces de revertir la situación, tanto en juego, como en goles, pero, lamentablemente no supimos ganar, dos graves errores de dos jugadores que por su veteranía y calidad nunca debieron producirse, (Curtois y Modric) propiciaron la, para mí, injusta victoria del Barça, pero hasta ahí, se perdió, y ya está. Lo verdaderamente grave vino al final.
Nuestro Club viene atravesando un proceso de crispación que alcanza yá características de alarma. Estamos enfrentados al mundo futbolístico prácticamente en todas sus vertientes y también a aspectos no solo de ese mundo y, por tanto, la crispación ha tomado asiento en todas las formas del estamento; Club, directiva, socios, afición y a esta desagradable situación no son ajenos los propios jugadores
Las funestas, extemporáneas y agresivas declaraciones efectuadas 24 horas antes de la final por quienes habrían de dirigirla, provocaron una serie de reacciones cuyas consecuencias van a traer mucho perjuicio al Club en general.
La actitud de profesionales como Rudiger, Bellingam, Lucas Vázquez y alguno más a la finalización del encuentro, no solamente fue un efecto de no saber perder; “cuando pierden dan la mano” dice nuestro himno, es que han dejado en situación de liquidación por cierre la única esperanza de trofeo que nos quedaba esta temporada, tal y como podemos considerar la liga, porque las expulsiones llegarán hasta Barcelona y, nunca se puede decir seguro, pero las opciones de ganar allí, sin Rudiger y Bellingam, se van a reducir bastante.
Se impone una reflexión a nivel general, desde la zona noble del Club, hasta el último socio o aficionado que sentimos al Real Madrid: ¿Es conveniente para nuestra entidad mantener está crispación y este frentismo impropio de una entidad de la categoría de la nuestra? ¿No pueden efectuarse planes de recuperación de los puentes rotos a nivel institucional para hacer imperar la razón y la justicia en un medio de la trascendencia del que nos movemos?
Llegan tiempos donde la diplomacia y la inteligencia institucional se deben hacer más presentes que nunca en este Club, en estos momentos vienen a mí memoria figuras tan fundamentales en otros tiempos como fueron Raimundo Saporta y Antonio Calderón. Las formas y modos de estas personas crearon escuela, utilicemos está experiencia.
La temporada, salvo imprevistos favorables aparenta liquidada, aprovechemos este paréntesis para prepararlo todo mejor hacis la próxima; calma, unión, imaginación y mano izquierda, de las malas experiencias, si se saben aprovechar, pueden salir situaciones mucho más favorables, así que evitemos los ruidos, los victimismos y los malos ambientes y construyamos entre todos un futuro mejor. Apoyo total al Presidente, directiva, jugadores y unión general, nada sería peor que la crispación se trasladase en estos momentos al graderío del Bernabéu.
Calma, ánimo y unión.
¡HALA MADRID POR SIEMPRE!!!!