Juanito, Santillana y Sanchis celebrando un gol en una de las famosas remontadas. |
Pocas veces he traído artículos publicados en la prensa nacional, de hecho creo que este es el segundo o tercer artículo publicado en esta sección. Pero me gustó lo que leí, y me gustó por venir de un madridista. Fue publicado el lunes pasado en el diario Marca por Miguel Serrano bajo el titulo “¿ Podemos? ” y decía así:
Cunde el pesimismo, la desolación, la desesperanza, el desaliento, la tristeza, la desilusión, el desánimo y la desazón entre el madridismo por culpa de las bajas. Una suerte de hipocondría victimista y pueril se ha apoderado de una afición que ha perdido la fe en un equipo que forjó su historia a puro huevo.
En mis tiempos, tú te plantaban en el Bernabéu con una caja de juanolas y convencido de meterle seis al Anderletch, cuatro al Bayern, cinco al Inter o los que fueran menester. Y entonces no jugaba Modric, sino un tal Ángel que era un Kherdira de Salamanca. El lateral izquierdo no era Marcelo, sino Isidro o Camacho, y arriba, en lugar de Bale y Benzema, teníamos a Juanito y a Santillana, más El Buitre, que era como Jesé pero sin gorro ni flow.
Al equipo no tenia ni la mitad de talento de éste, pero sus jugadores tampoco tenían esquiotibiales, ni sóleos, ni metatarsianos. Igual veías acabar a Camacho un partido con la cabeza abierta, a Michel con el brazo en cabestrillo y a Gordillo con calambres hasta en el sobaco. Pero tenían que remontar y remontaban, a veces con más pelotas que fútbol.
Ahora muchos creen que el Madrid en la Champions tiene el fututo más oscuro que Rodrigo Rato, quizá porque este equipo les (nos) ha acostumbrado al fútbol de salón con el viento a favor, pero a desmoronarse con el viento de cola. Todos los recientes y artificiales intentos de remontada – Lyon, Dortmund, y hasta el ultimo de Copa ante el Atlético- han muerto en los vídeos de Arbeloa y en el bullicio de Concha Espina a la llegada del autobús. Poca cosa.
Quizá ha llegado la hora de que alguien que sepa de verdad lo que es el Real Madrid -no sé, Hierro, Chendo, Butragueño o el mismísimo Florentino- dé una clase a la plantilla de lo que ha sido siempre este club. Que recuerden su historia. Que recuerden su escudo. Que recuerden lo que decía Benito Floro en Lleida. Que sois el Real Madrid ,hijos.
Miguel Serrano en el Diario Marca (Lunes 20 de abril de 2015)