Hugo González: El futuro está aquí, nuestro canterano dejo muestras de su calidad destapándose en la anotación en el último parcial. Fotografía Javi Gordo.”
Victoria del Real Madrid con la máxima diferencia de la temporada, 33 puntos, casi 100 de valoración (128-29) con siete jugadores en dobles dígitos en éste aparado. El partido permitió a Chus Mateo dar descanso a sus jugadores y generar ilusión con la presencia de jóvenes canteranos, además de aprovechar para continuar con el rodaje de Carlos Alocén.
Real Madrid 91 Andorra 58
Hala Madrid…
A medio gas
En una semana muy cargada, Chus aprovechaba para rotar el equipo y dar descanso a varios jugadores, Deck, Rudy y Chacho no formaban parte de la partida, sin contar con la baja por lesión de Yabusele. Causeur volvía tras estar ausente los dos últimos partidos por su reciente paternidad, enhorabuena crack. La convocatoria la completaban jóvenes canteranos, Hugo González e Ismaila Diagne. En los prolegómenos, minuto de silencio por la que siempre será una “chica ye-ye”, la gran Concha Velasco, D.E.P. Alocén llevaría los mandos de inicio, Facu estaba disponible pero sólo disputaría algo menos de 8 minutos en el partido, acompañado de Musa, Causeur, Ndiaye y Tavares. El inicio fue desconcertante, con un Madrid desconocido acumulando pérdidas en ataque, aunque los lucenses no aprovechaban las oportunidades, como muestra un botón, García, con 2-6 en el marcador, logra robar el balón sobre el boté de Alocén pero se precipita lanzando un triple en la contra, sin ventaja en el rebote, malgastando la ventaja generada. Pasarían casi 4 minutos para ver el primer acierto en el triple, Fernández ponía el 5-9 en el marcador y era contestado por Musa, el más acertado del Madrid cara al aro en el partido, casi de inmediato. Los visitantes se mantenían arriba en el marcador en una fase de intercambio de canastas y errores, tendríamos que esperar hasta el minuto 8:46 para ver al Madrid por primera vez arriba, 16-15 merced a dos tiros libres del bosnio. Poco duraría la alegría, en la jugada siguiente Anderson también desde la línea de personal devolvería la ventaja a los visitantes que la mantendrían hasta el final del periodo, 17-19.
Si había sido Zipi quien había “tirado” del equipo en el primer cuarto, ahora era su “brate” Zape, Super Mario, quién tomaba el relevo, esta vez aportando al equipo desde la posición de cuatro ante las ausencias de Deck y Oso bailarín. El partido se mantenía empatado, sin cambiar la tendencia, partido muy trabado con acciones desafortunadas, errores en el tiro y pérdidas. Facu era castigado con técnica tras protestar una acción que entendía como falta, a veces me da la impresión de que los árbitros no saben leer el partido, no digo que no la mereciera, no sé qué pudo decir, pero hay jugadores a los que parece se consiente menos que a otros. Con 24-25 Chus opta por jugar sin un base puro, con Abalde y Llull repartiéndose las tareas de dirección, el plan no sale mal, el Madrid recuperaba poco después el mando del partido que no soltaría ya hasta el final del encuentro. Con mayor intensidad en defensa, y controlando por fin las pérdidas el Madrid lograba ampliar diferencias, una recuperación de Llull que asiste a Musa, y un triple del “increíble” con asistencia esta vez de Abalde acercan a la barrera de los 10 puntos, 37-28, distancia que se supera antes del descanso merced a dos tiros libres de Ndiaye y dos de Edy, el Madrid había encontrado un filón en juego interior. 41-28 al descanso, con una estadística demoledora, el Madrid únicamente había concedido 9 puntos en el segundo cuarto.
Sin piedad
Pequeña rección visitante de la mano de Fernández con cinco puntos consecutivos merced a un triple, y a un mate tras jugada personal que fue premiada con aplausos por parte del público madridista, la espectacularidad de la acción lo merecía. Poco duró la alegría, cuando parecía que los gallegos podían sacar la cabeza del agua para no ahogarse, dos triples por parte de Causeur y Alocén fueron la soga y la piedra que terminaron por hundir las aspiraciones visitantes. El Madrid seguía aumentando la intensidad defensiva, con dominio absoluto de los tableros, 50 rebotes por 32 del rival, e incluso fuera de ellos como demuestra “chiqutín” taponando saltando desde muy lejos un intento triple lucense, curiosamente tras esta gran acción vendrían otras dos que vendrían a confirmarme mi “descabellada” teoría contra lo incomprensible del arbitraje, en el siguiente ataque, Edy coge un rebote ofensivo que los árbitros castigan con falta de ataque, nuestro pivot, con gran enfado protesta y llega a hacer un desplante desplazando el balón de un cabezazo, los árbitros esta vez de forma incomprensible no se atreven a señalar la técnica, aunque se cobrarían su venganza señalando una nueva personal al caboverdiano, esta vez en defensa, y de nuevo más que dudosa. Mediado el segundo cuarto, nueva aparición estelar de Hezonja para dinamitar el partido y elevar la diferencia por encima de los 20 puntos, el croata en una penetración recibe falta personal, su defensor, Anderson, no contento con la falta, le golpea en la caída y recibe una antideportiva adicional, Mario no falla con los 4 tiros libres, y con la posesión adicional asiste a Causeur que anota de tres el 58-37, jaque mate. Faltaban todavía cinco minutos del tercer cuarto pero el Madrid solo concedería una canasta más a los visitantes, un triple de Polite, elevando la distancia al final del cuarto a los 28 puntos 68-40.
Con el partido decidido el último parcial sirvió para que los madridistas disfrutáramos de lo lindo con la presencia de nuestros canteranos, minutos en los que el “veterano” era Alberto Abalde con 27 años, a su lado Alocén con 22, Ndiaye 19, González 17 y Diagne 16, parecíamos “padres” disfrutando del típico partido del fin de semana de los hijos con los compañeros del colegio. Destacó Hugo que se destapó en el periodo con 10 de sus 12 puntos del partido dejando señales del jugadorazo que está llamado a ser, también Ndiaye dominando el rebote. Hubo tiempo para una nueva técnica, esta vez a Abalde, como decía antes, no comprendo la lectura del partido por parte de algunos colegiados, algo muy grave debió ser para ese castigo en un partido decidido. La ventaja superó los 30 puntos, y lo más importante, el rival no llegó a los 60. Pocas lecturas se pude hacer del encuentro más allá de vislumbrarse un futuro prometedor, aunque siempre con el “peligro” de la llamada de esa sirena embaucadora llamada NBA, pero al menos ha servido para que los jugadores más castigados descasasen en una semana muy cargada.
91 – Real Madrid (17+24+27+23): Alocén (10), Causeur (10), Musa (17), Ndiaye (7), Tavares (4), -cinco inicial-, Poirier (4), Hezonja (11), Abalde (2), Campazzo (3), Llull (6), Hugo González (12) y Diagne (5).
58 – Río Breogán (19+9+12+18): Sergi García (-), Érik Quintela (8), Juan Fernández (19), Momirov (-), Sajus (2), -cinco inicial-, Anderson (4), Polite (11), Rudan (4), Jogela (6), Ventura (3), Frankamp (1) y Sergi Quintela (-).
…y nada más
Tenemos ciertos rituales, como preguntarte que es lo que va ha pasar en el partido que tenemos que jugar. Hoy me decías antes de entrar al Palacio “¡facil!”. Al final del primer cuarto me mandabas un WhatsApp (tenemos localidades en distintos zonas) para decirme “para qué hablaré”, jajaja. En el fondo sabíamos que era una caraja con la que había comenzado el equipo, pero luego fue prácticamente un paseo. Son dos derrotas, una en cada competición, de un total de 33 partidos disputados entre ACB y Euroliga. Dos partidos en los que el equipo estuvi siempre en el partido y que pudo llevárselos. Tenemos motivos suficientes para soñar con una temporada grande. Como siempre, gracias por la crónica. Abrazo fuerte y Hala Madrid siempre!!!