«Imagen. Los jugadores posan con el trofeo junto a Don Santiago Bernabéu. Fotografía Realmadrid.com»
Si el equipo de fútbol comenzó a escribir su leyenda con esas primeras cinco Copas de Europa consecutivas, el equipo de baloncesto pudo llegar a lograr una gesta similar, ya que perdió las ediciones de 1962 y 1963 para ganar las de 1964 y 1965. De esta última hablaremos hoy.
1964-1965 <<La Segunda >> CSKA Moscú
Tras ganar la edición anterior el Real Madrid salía a defender su primera Copa de Europa ganada en la sección. Para ello y en segunda ronda se tendría que enfrentar al Helsingin Kisa-Toverit rival finlandés. En Finlandia los nuestros se imponían por 100-109 y en Madrid lo hacían de nuevo por 97-51.
En cuartos de final el rival es el ASVEL francés. Los nuestros vencen en ambos partidos, venciendo en Francia por 65-83 y en Madrid 84-65. En semifinales nos toca en suerte el OKK Beograd de la antigua Yugoslavia. Los nuestros se imponen en la capital por 84-61 para caer en Belgrado por 113-96.
En la final jugada a doble partido frente al CSKA de Moscú los nuestros pierden en la capital soviética por 88-81 para imponerse en Madrid por 76-62 y alzarse con su segunda Copa de Europa de forma consecutiva.
(IDA) MOSCÚ (8/4/1965)
88-CSKA de Moscú: Alachachian (8), Travin (11), Volnov (18), Korneev (18), Lipso (9) – Astakhov (10), Borodin (9), Zubkov (2) y Kulkov (3).
81-Real Madrid: Sainz (7), Sevillano (11), Emiliano (10), Luyk (28), Burgess (15) – Descartín (4), Durand (4) y Scott (2).
(VUELTA) MADRID (13/4/1965)
76-Real Madrid: Sainz (9), Sevillano (1), Emiliano (24), Luyk (18), Burgess (16) – González (7) y Descartín (1).
62-CSKA de Moscú: Alachachian (6), Astakhov (8), Volnov (8), Korneev (11), Lipso (6) – Borodin (7), Chechuro (10), Kulkov (6), Zubkov (0) y Travin (0).
El entrenador madridista era ya Pedro Ferrándiz. En la plantilla madridista estaban: Miguel González, José Ramón Durand, Julio Descartín, Lolo Sáinz, Fernando Modrego, Jorge García, Emiliano Rodríguez, Carlos Sevillano, Jim Scott, Clifford Luyk, Bob Burgess y Moncho Monsalve.
Muy interesante traer al recuerdo estos grandes logros.
Esta Copa de Europa supo especialmente bien, más que nada por el rival de la final, el poderoso CSKA de Moscú.
En aquel entonces, Emiliano y Luyk estaban intratables, vaya dos jugadorazos.